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Los astrónomos que trabajan con el telescopio Hubble han publicado una nueva imagen. Muestra la galaxia NGC 4694, que pertenece a un tipo intermedio bastante raro.

Galaxia NGC 4694. Fuente: ESA/Hubble y NASA, D. Thilker

La mayoría de las galaxias del Universo pertenecen a uno de dos tipos fáciles de identificar. Por un lado, están las galaxias espirales como nuestra Vía Láctea. Son jóvenes, enérgicos y tienen brazos en espiral que contienen estrellas brillantes y calientes. Estas galaxias también cuentan con las reservas de gas necesarias para la formación de nuevas estrellas.

En el otro extremo de esta escala se encuentran las galaxias elípticas. Tienen una estructura esférica homogénea sin rasgos distintivos. A diferencia de las galaxias espirales, las galaxias elípticas están pobladas por estrellas rojas más antiguas. Además, casi no contienen reservas de gas, lo que significa que en ellos no nacen más estrellas nuevas. Estas estructuras pueden denominarse metafóricamente “jubilados espaciales”.

Entre estos dos opuestos cósmicos existe un vínculo intermedio: las galaxias, que combinan características de galaxias espirales y elípticas. Se llaman galaxias lenticulares. Una galaxia de este tipo, denominada NGC 4694, se captura en esta imagen del Hubble.

NGC 4694 está a 54 millones de años luz de la Tierra. Es parte del grupo de Virgo. Como ilustra la fotografía, tiene forma de disco, pero sin ningún signo de brazos espirales y, como en las galaxias elípticas, se están formando pocas luminarias nuevas. Al mismo tiempo, la población estelar de NGC 4694 es todavía relativamente joven. En su núcleo todavía se están formando activamente nuevas estrellas. La galaxia también está llena de gas y polvo, que forman estructuras caóticas, lo que indica algún tipo de perturbación.

La fuente de estas perturbaciones puede ser la galaxia enana vecina VCC 2062. Los astrónomos descubrieron que NGC 4694 está rodeada por una nube de hidrógeno. Forma una especie de “puente” que se extiende hasta VCC 2062. De hecho, la galaxia más grande está robando gas a su compañera. Esto le permite luchar contra una “crisis de la mediana edad” y conservar una apariencia más joven.

Anteriormente os contamos cómo el Telescopio James Webb descubrió una galaxia lejana que permitiría comprender mejor cómo se produjo la evolución del Universo.

Según Esahubble